Hace bastante
tiempo mi marido me comentó que había probado el brownie más bueno que había
comido nunca, lo había hecho una compañera suya de trabajo y claro
inmediatamente le dije que por favor le pidiera la receta.
Su compañera muy
amablemente le dio la receta y yo no se porqué motivo la guardé en mi carpeta
de pendientes hasta hará unos tres años que me acordé de ella.
Desde la primera
vez que la hice supe no solo por lo rico que está el brownie sino por lo
sencillo de su elaboración que la repetiría muchas veces como así ha sido.
Puedo decir que es
casi con toda seguridad la receta dulce que más veces he compartido con mis
amigas y es que además casi todas las medidas son por vasos y ese tipo de
recetas me encantan ya que cocino mucho “a ojo” como se suele decir.
Sin embargo por
unas cosas u otras no la tenía publicada en el blog y mira que la hago veces.
Unas veces porque no le había hecho la foto que quería, otras porque no tenía
la cámara y así entre unas cosas y otras se iba retrasando su publicación.
Bueno a decir verdad si la tenía publicada pero con cobertura de crema de queso
que también queda estupendo, pero quería ponerlo solo para darle el
protagonismo que se merece y porque es así como normalmente lo comemos. Podéis
ver la receta con cobertura de queso que publiqué hace tiempo aquí.
Pero el remate del
tomate fue este fin de semana pasado que le pasé la receta a una amiga y como
tenía en mente una receta dulce para la próxima publicación la he cambiado por
esta.
He rescatado esta
foto de la última vez que lo hice para disfrutarlo con la familia y amigos a
finales del mes de abril con ocasión de la Romería de la Virgen de la Cabeza de
Andújar

Y esta otra donde
se ve un trozo individual servido con el ganaché de chocolate y helado de
vainilla y nueces, escandalosamente bueno y sencillo de verdad verdad

Ingredientes:
Para el brownie:
200 grs. de
chocolate negro para fundir de cobertura
3 huevos
80 gramos de
mantequilla
1 vaso de los de
agua de azúcar
1 vaso de los de
agua de harina
Un puñado de nueces
peladas y troceadas grandes
Para el ganaché de
chocolate:
100 grs. de
chocolate negro de cobertura
100 ml. de nata
para montar
Helado de vainilla
Nueces
Para hacer el
brownie: troceamos el chocolate y la mantequilla y lo ponemos en el microondas
durante intervalos de 30 segundos hasta que veamos que se ha fundido,
removiendo cada vez para que no se queme el chocolate.
Si no tenemos
microondas lo podemos hacer el baño María.
Una vez fundido el
chocolate con la mantequilla sacamos del micro y reservamos para que se enfríe
ligeramente.
A continuación
batimos los huevos y los mezclamos con el azúcar y la harina. Añadimos la
mezcla de chocolate y mantequilla integrando bien el conjunto.
Por último añadimos
las nueces, volvemos a mezclar y echamos la masa en un molde que tendremos
untado de mantequilla.
Horneamos en horno
precalentado a 180º con la parte de arriba y abajo durante unos 20 minutos.
Sacamos del horno y
esperamos que se enfríe.

El brownie nos lo
podemos comer tal cual cuando se enfríe o bien podemos cortar un trozo,
calentarlo unos 20 segundos en el microondas y después añadirle por encima
helado de vainilla. Por último cubrimos con un poco de cobertura templada que
haremos fundiendo el chocolate con la nata y espolvoreando por encima unas
nueces.